La familia narcisista

Dondequiera que miro, veo señales del mandamiento de honrar a tus padres, y en ninguna parte veo un mandamiento que exija el respeto a los hijos.

- Alice Miller

Para mantener un yo falso y grandioso, el narcisista necesita un suministro narcisista. A lo largo de su vida, reinan sobre sus hermanos y parientes más jóvenes, o buscan compañeros de clase más débiles en la escuela para «hacerse amigos». Avergüenzan a los demás mientras actúan sin vergüenza, utilizando a las personas como bloques de construcción para sostener su ego. Crean chivos expiatorios para construir su reputación y evitar su sombra. En lugar de construir relaciones basadas en la empatía, la reciprocidad y el apoyo, convierten a los demás en extensiones de sí mismos. Atraen a su persona objetivo con su encanto y debilitan su autoestima con burlas, todo ello bajo la apariencia de una conexión. El narcisista solo puede tener un sentido positivo del yo cuando está en presencia de alguien a quien puede controlar. Si no hay nadie presente que le refleje su yo grandioso, su trauma infantil no resuelto sale a la superficie y se llena de incertidumbre y temor.

El narcisista envejece y probablemente ha pasado por docenas de amistades. La mayoría de las personas acaban percibiendo el vacío y la explotación de la relación y, en consecuencia, se alejan. El yo falso del narcisista sufre grietas, pero él lo refuerza con personas objetivo sustitutivas. También puede seducir a un amante potencial, aprovechándose de la escisión de su pareja y transformando su propio comportamiento para que coincida con lo que su pareja percibe como ideal. Este ardid funciona durante un tiempo, pero a menudo termina en desilusión y ruptura, o el narcisista se aburre y se marcha.

Se necesita un gran esfuerzo para seducir y...