La historia no se repite, pero a menudo rima
- Mark Twain
Los miembros de una familia narcisista son víctimas de un asesinato del alma. Independientemente de su papel o lugar en la jerarquía, su realización fue secuestrada por un yo falso. En una familia narcisista, nadie gana. El concepto de ganadores y perdedores se esfuma cuando te das cuenta de la agotadora lucha que se libra y del precio que cada persona paga por mantenerse a flote. Cuando a nadie se le permite realizar y expresar su yo verdadero, todos pierden, incluido el narcisista.
Una persona criada en una familia narcisista a menudo cae en sistemas que le permiten repetir su papel. Los niños mayores o dorados buscan relaciones y estructuras sociales en las que puedan ser admirados o tener el control, los niños perdidos encuentran posiciones en las que pueden mantenerse al margen y evitar ser presionados, y los facilitadores buscan relaciones y lugares en los que puedan retomar el papel de ayudantes.
Los ámbitos narcisistas existen en todas las facetas de la sociedad. Lo que hace que un espacio sea narcisista depend...
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