Paul tiene una pesadilla recurrente en la que está atrapado en una cueva subterránea rodeado de llamas ardientes. Una intensa sensación de claustrofobia sacude su interior y se despierta aterrorizado, jadeando en busca de aire. Se da cuenta de que está sufriendo un ataque de pánico. Se siente como si estuvieras en el purgatorio; un miedo insoportable e infinito del que intentas escapar desesperadamente, pero no encuentras la manera de salir. Te apresuras a encender la luz y empiezas a caminar de un lado a otro de tu apartamento tratando de sacártelo de la cabeza. Bajás corriendo las escaleras y sales al aire frío de la mañana. Te ayuda un poco. Tardás más de una hora en disipar la sensación de pánico. No tenés ni idea de por qué sigues teniendo sueños como este.
Cindy es una chica inteligente y agradable. Su sonrisa rota delata la tristeza que hay en su interior, pero es educada y se muestra lo suficientemente feliz, por lo que la gente no se entromete en sus asuntos. Obedece dócilmente la mayoría de las peticiones, tiende a estar de acuerdo con la mayoría de las opiniones y sigue la mayoría de los planes de los demás. Simplemente está ahí, y la gente puede confiar en que no va a crear problemas.
Igor tiene 34 años, pero la gente cree que tiene 25. Es un soñador. Le gustaría formar parte de una banda o quizá escribir la próxima gran novela. No está seguro de qué. Nunca se ha sentido lo suficientemente capaz o inteligente como para luchar por sus sueños. Para empeorar las cosas, se siente atrapado trabajando en un centro de atención telefónica. Además, lleva cuatro años con su novia Anna, con la que ha tenido una relación intermitente. Cada vez que luchan, Igor amenaza con marcharse, pero se encuentra con lágrimas y amenazas de suicidio. La culpa es abrumadora y se queda. Quiere desesperadamente dejar la relación, pero no ve una salida.
Después de un intenso romance de verano, Noah le pidió a Ariana que se casara con él. Ella dijo que sí. Noah era un sueño hecho realidad. Era atento, centraba toda su energía en Ariana, compartía sus sueños y estaba listo para comprometerse. Se casaron en una ceremonia sencilla. Poco después de la boda, las cosas empezaron a cambiar. Noah se volvió crítico con Ariana y se enfurecía si ella llegaba a casa más tarde de lo esperado. Ariana había visto esa ira en pequeñas dosis antes de la boda, pero no le había dado importancia, sobre todo porque Noah se disculpaba rápidamente con su desesperación infantil. Noah era grandioso e insistía en que todo lo que hacía era muy superior a lo de los demás. Le encantaba ser el centro de atención y contaba historias interminables a cualquiera que quisiera escucharlas, sin mostrar nunca interés por el oyente. Tenía un cierto encanto, por lo que la mayoría de la gente lo toleraba. Ariana estaba profundamente insatisfecha con la relación y cansada de la ira de Noah, que surgía de forma aleatoria y sin motivo aparente. Después de catorce años, tres hijos y haber dejado atrás a la mayoría de sus amigos, le aterrorizaba la idea de marcharse y empezar de nuevo.